Récord hotelero en Semana Santa por alta demanda.
La combinación de una Semana Santa tardía, aumento de la demanda y precios moderados impulsa al alza las previsiones del sector turístico.

La industria hotelera en España se prepara para una Semana Santa excepcional, con previsiones de ocupación que alcanzan el 85% y un incremento en los ingresos de hasta un 14% respecto al año anterior.
Este repunte se atribuye a la recuperación del turismo internacional, la anticipación en las reservas y una moderación en los precios que ha incentivado la demanda.
Alta ocupación en destinos clave.
La Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) ha informado que se espera una ocupación media del 85% a nivel nacional.
Comunidades como Andalucía, Canarias y Cataluña lideran las reservas, con picos que podrían superar el 90% durante los días festivos.
En zonas urbanas y destinos culturales como Madrid, Sevilla y Granada, el tirón de la Semana Santa como evento religioso y cultural también ha impulsado las reservas.
Ingresos por encima de niveles prepandemia.
Según CEHAT y datos recogidos por plataformas como STR y Exceltur, el ingreso medio por habitación disponible (RevPAR) ha aumentado un 14% respecto a 2024, superando incluso los niveles de 2019.
Este repunte se explica por un mayor volumen de turistas y una estrategia de precios más eficiente por parte de las cadenas hoteleras.
El presidente de CEHAT, Jorge Marichal, señaló que "la campaña de Semana Santa va camino de convertirse en una de las mejores de la última década".
El turismo internacional vuelve con fuerza.
La demanda extranjera, especialmente de mercados como Reino Unido, Alemania, Francia e Italia, ha sido clave para impulsar la ocupación.
El favorable clima y el atractivo cultural de estas fechas han consolidado a España como uno de los destinos favoritos en Europa para las vacaciones de primavera.
El retorno del turismo internacional también ha incentivado el gasto medio por turista, que según Turespaña ha crecido más de un 10% con respecto al año anterior.
Moderado aumento de precios
Aunque los precios hoteleros han subido un 4% de media, los analistas coinciden en que esta subida ha sido moderada y acorde al contexto inflacionario general.
Este equilibrio ha permitido mantener la competitividad del sector sin frenar la demanda.
Las reservas anticipadas, muchas de ellas realizadas con meses de antelación, también han favorecido precios más estables para los viajeros.
La Semana Santa tardía impulsa el turismo de nieve
La celebración de la Semana Santa en abril ha coincidido con un final de temporada invernal favorable para los destinos de montaña.
Estaciones de esquí en el Pirineo catalán, aragonés y andorrano han aprovechado las últimas nevadas para atraer a un importante número de turistas que combinan ocio religioso y deportes de invierno.
Este efecto estacional ha diversificado aún más la oferta y ha permitido un mayor reparto de los ingresos en distintas regiones del país.
Perspectivas optimistas para la temporada alta
Los buenos resultados de Semana Santa sirven como antesala de una temporada primavera-verano que se espera igualmente positiva.
El sector confía en consolidar la recuperación plena tras los años más duros de la pandemia, con un verano que podría incluso superar récords históricos si se mantienen las tendencias actuales.