Pensionistas Reclaman a Hacienda la Devolución Inmediata del IRPF
Jubilados reclaman el pago inmediato del IRPF cobrado de más por cotizaciones a mutualidades, ante retrasos en la nueva normativa

Miles de pensionistas que cotizaron a mutualidades laborales entre 1967 y 1978 están a la espera de la devolución del IRPF pagado en exceso, un derecho reconocido por el Tribunal Supremo.
Sin embargo, la Agencia Tributaria ha pospuesto los pagos hasta que se apruebe una nueva normativa, lo que ha generado indignación entre los afectados, quienes exigen a Hacienda: “Háganlo ya”.
Un derecho reconocido por el Tribunal Supremo
La controversia se remonta a sentencias del Tribunal Supremo de febrero de 2023 y enero de 2024, que determinaron que las aportaciones a mutualidades laborales realizadas antes de 1979 no debieron tributar íntegramente en el IRPF, ya que generaban una doble imposición.
Esto afecta a cerca de 4.8 millones de jubilados y herederos de sectores como banca, construcción, metalurgia y comercio, quienes tienen derecho a una reducción del 25% en la tributación de la parte de su pensión derivada de esas cotizaciones (100% para aportaciones anteriores a 1967).
Las devoluciones, que pueden alcanzar hasta 4,000 euros por persona, corresponden a los ejercicios fiscales no prescritos (2019-2022) y al ajuste automático en la Renta 2024.
Cambios normativos que generan retrasos
Inicialmente, Hacienda permitió solicitar las devoluciones a través de un formulario único, pero a finales de 2024 anunció que los pagos se realizarían de forma fraccionada hasta 2028, lo que provocó críticas por parte de asociaciones de pensionistas y sindicatos como CCOO y UGT.
En abril de 2025, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, prometió un cambio normativo para agilizar las devoluciones en un solo pago durante 2025, pero la falta de aprobación de esta reforma ha paralizado el proceso.
Los jubilados, muchos de edad avanzada, denuncian la lentitud y exigen acción inmediata, como expresó José Luis Fernández Santillana, presidente de CEOMA: “Aquí hay dos cosas: una, la que iban a hacer, y otra, lo que no han hecho”.
Impacto en los pensionistas
El retraso afecta especialmente a jubilados con pensiones bajas, muchos de los cuales no están obligados a presentar la declaración de la Renta por no alcanzar el umbral de 22,000 euros anuales.
Para estos casos, la Agencia Tributaria recomienda presentar la declaración voluntariamente para reflejar el ajuste fiscal (casilla 0003, “Ajuste por Mutualidades – DT2 LIRPF”). Sin embargo, aquellos sin retenciones en su pensión, como Rosa María Torralba, quien reclama más de 2,000 euros, no recibirán devolución alguna, lo que ha generado acusaciones de discriminación por parte de colectivos como COESPE.
Estas desigualdades han avivado el malestar, con pensionistas exigiendo “más justicia social”.
Proceso para reclamar la devolución
La Agencia Tributaria ha habilitado un formulario en su Sede Electrónica, disponible desde el 2 de abril de 2024, para solicitar las devoluciones de los ejercicios 2019-2022.
Los requisitos son mínimos: identificarse con Cl@ve, certificado digital o DNI electrónico, proporcionar un número de cuenta bancaria y un teléfono de contacto. No se requiere documentación adicional, ya que Hacienda colabora con la Seguridad Social para verificar las cotizaciones.
Sin embargo, los pensionistas deben presentar una solicitud por cada ejercicio fiscal, y las devoluciones están paralizadas hasta la aprobación de la nueva normativa.
Además, quienes no hayan recibido el pago antes del 31 de diciembre de 2024 pueden reclamar intereses de demora del 4.0625%.
Llamado a la acción y críticas
Asociaciones como la AEDAF han llevado el caso a los tribunales, denunciando los retrasos como “arbitrarios y discriminatorios”.
En redes sociales, usuarios como @CastellsPilar han criticado la gestión de Hacienda, calificándola de “una falta de respeto al colectivo más vulnerable”.
Mientras tanto, la Agencia Tributaria insiste en que el ajuste automático se aplicará en la Renta 2024, pero los pensionistas piden celeridad para recibir el dinero adeudado.
La presión social y las demandas legales podrían acelerar la reforma normativa, pero, por ahora, los jubilados mutualistas deben armarse de paciencia mientras esperan justicia fiscal.